Han pasado meses ya de la transmisión del concierto grabado de Juan Diego Flórez en el Teatro Colón de Buenos Aires, un concierto que data del 26 de septiembre de 2018 y que fue liberado (en Facebook y Youtube) el 12 de abril del presente año para vista y disfrute del mundo entero. Ya andábamos en pandemia (como ahora) y confinamiento (bastante relajado en la actualidad), y ya se hallaban las condenadas “curvas” en pleno apogeo en mi país y Sudamérica.
Aquel día, sintonicé el estreno en Facebook y, poco a poco, me fui adentrando en la música, hasta tan solo dejarme llevar. Pensé, recordé y extrañé. Melancolía.
Sentí la motivación e inspiración para escribir. Me senté y lo hice. Pensé, recordé, imaginé, sentí. Y palabras fluyeron.
En el transcurso de lo que continuó hasta hoy, he editado en al menos un par de oportunidades aquel texto inicial. La versión final es la que verán a continuación, y la que guarda la mayor precisión respecto de lo que quise expresar.
Te conocí y, en el final, cambiaste mi perspectiva sobre el entendimiento de una conexión. Fue la risa, la naturalidad, la complementación.
Conversar y reír, conocer y escuchar, compartir y mirar. Apreciar tu ser, tu perspicacia y orden, tu compromiso y responsabilidad. Tu esencia.
Me llevo mucho gracias a ti entre recuerdos e imágenes.
Y me conduzco al sentir del amanecer. El salir de mi carpa en una gran montaña y apreciar el atardecer más intenso. La espera que antecede al gran esfuerzo, y el último esfuerzo. El último paso, y la cumbre. El gritarlo con toda la emoción efervescente en el pecho. La lágrima que cae por mi mejilla cuando observo el increíble dibujo que se cierne frente a mí. La inalcanzable belleza de este paisaje y su propio y acogedor infinito.
Allí estarán nuestras vidas, en montañas distintas y distantes, lo he comprendido. Y así te llevo, como todo lo importante en la vida, entre recuerdos e imágenes.
…
Las melodías de aquel concierto fueron mágicas. Llegué a pensar y recordar, sentir e imaginar, añorar y soñar, y de ello salieron mis palabras.
Dejo el video aquí.
Un abrazo.
Foto de portada por Joey Kyber (Pexels).
Un buhíto en la montaña 